El par EUR/USD tocó la semana pasada niveles de 1,2149, su nivel más alto en más de dos meses, pero no pudo mantener ese nivel y terminó la semana prácticamente sin cambios, en niveles de 1,2020. Ayer el par se mantuvo alcista, llegando a 1,2075, sin embargo, no pudo mantener las ganancias y se sitúa en la actualidad en niveles de 1,2035. El calendario macroeconómico deja claro que la recuperación económica de Estados Unidos está varios pasos por delante de la de sus principales competidores y en este escenario el Dólar tiene dificultades para subir, con los inversores buscando activos de mayor riesgo por la situación optimista que vive el mercado.
La FED en su reunión del pasado miércoles fue la principal causante de la caída del Dólar, ya que los inversores esperaban comentarios sobre la reducción de la compra de bonos, pero su presidente Jerome Powell repitió que necesita un mayor progreso sustancial hacia los objetivos de la FED antes incluso de pensar en una modificación de la política monetaria. Ayer Powell declaró que la economía de los Estados Unidos está mejorando, pero que aún no está fuera de peligro, en línea con la prudencia que ha mantenido en sus últimas declaraciones.
Respecto al discurso de la FED, parece que el mercado lleva debatiendo unas semanas sobre el momento en el que se anunciará el comienzo de la reducción de las compras que, a la luz de los buenos resultados de crecimiento y de empleo, podría ser a la vuelta del verano tras la conferencia en Jackson Hole. Por otro lado, la presión inflacionista parece no preocupar a la FED, ya que considera que el repunte que pueda producirse sería transitorio y no estructural, sin embargo, cada vez más analistas creen que la inflación puede ser más persistente de lo que la FED está estimando.
En relación a la deuda pública, la reacción inicial del mercado al mensaje de Jerome Powell fue positiva, soportado bajo la premisa del exceso de liquidez desplegado por los Bancos Centrales. Sin embargo, a finales de la semana pasada pudimos ver como poco a poco la curva comenzó a repuntar desde los sorprendentes mínimos en los que nos encontrábamos (1,55%), 1.61% ahora. En principio, dado el contexto económico y fiscal, teniendo en cuenta la nueva propuesta de Biden de $1.8trn adicionales a los $2.3trn del plan de infraestructuras, inevitablemente la curva podría repuntar hacia máximos recientes, aunque dependerá de la FED que sea un movimiento brusco o no.
Desde Estados Unidos y en el plano macro, el ISM manufacturero estuvo por debajo de lo esperado (60.7 desde 64.7 de marzo), reflejando cierto enfriamiento en el sector. Aunque el dato más relevante de la semana será el informe de nóminas no agrícolas NFP, que se publicará el próximo viernes. Se espera que la economía estadounidense haya agregado 926.000 nuevos empleos en abril, mientras que se prevé que la tasa de desempleo se haya reducido al 5.8% desde el 6% visto el mes anterior.