Entre los eventos acontecidos durante el fin de semana pasado, cabe destacar la expansión a nivel mundial del coronavirus, así como el fuerte efecto que tuvo el mismo en la economía china, donde el PMI no manufacturero y manufacturero cayeron bruscamente, situándose en 29.6 y 40.3 respecto a las perspectivas de 53.8 y 45.7 que tenía el mercado. Con el fin de evitar una fuerte desaceleración en Europa y Estados Unidos, las principales economías de la Zona Euro podrían comenzar a aplicar algunos estímulos fiscales y la Reserva Federal, estaría dispuesta a ajustar su política monetaria con el fin de hacer frente a esta situación.
En Europa, el ministro de economía alemán, Peter Altmaier, dijo que Alemania no debe permitir que el brote de coronavirus afecte a su crecimiento económico. Estas declaraciones, unidas a los mensajes lanzados por el ministro Olaf Scholz durante la semana pasada, incrementan las posibilidades de que los estímulos por parte de Alemania lleguen en breve, siempre y cuando, continúe la situación actual de incertidumbre.
En Estados Unidos Powell comentó el pasado fin de semana que, los fundamentos de la economía de Estados Unidos se mantienen sólidos, pero también reiteró que la FED está preparada para actuar de emergencia ante el coronavirus, en caso que fuera necesario. Estos comentarios acrecientan las posibilidades de que la Reserva Federal actúe en la próxima reunión de marzo, donde se comienza a descontar un recorte de tipos de interés.